¿Te estás planteando integrar la IA generativa en tu estrategia de comercio electrónico? Tus clientes y tu negocio lo agradecerán.
La IA generativa puede transformar la forma en que os relacionáis con los clientes en tu empresa y aumentar la productividad de tu equipo comercial.
Ha llegado el verano y tu cliente está preparando su primera acampada. Cuando visita tu tienda electrónica, un asistente digital con tecnología de inteligencia artificial le da la bienvenida y le pregunta qué equipo y ropa le hace falta. Tras analizar datos como su historial de compras, las existencias y el pronóstico meteorológico del destino, le recomienda productos de los tamaños y colores que busca. Un radiante inicio de verano gracias a la ayuda de la inteligencia artificial (IA).
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La inteligencia artificial lleva años mejorando el comercio electrónico y, ahora, la IA generativa está rompiendo todos los esquemas: experiencias sin precedentes, mayor productividad, más conversiones y clientes más fieles. Todavía se están explorando las posibles aplicaciones de la IA generativa en el comercio electrónico. Hoy, examinamos cinco usos que se le están dando en la actualidad.
Facilita al máximo las compras de tus clientes
Catapulta tu negocio y transforma de arriba abajo tus actividades comerciales con datos generados por IA, capacidad predictiva y experiencias ultrapersonalizadas.
1. Personaliza aún más las recomendaciones de productos
Si bien hace ya tiempo que la IA recomienda productos a los consumidores digitales, su hermana generativa lleva la personalización al siguiente nivel, refinándola y ampliando sus horizontes. Esta innovadora tecnología optimiza la segmentación, perfecciona la personalización y, a la postre, ofrece experiencias más pertinentes en menos tiempo y con mayor contexto.
Las mejores plataformas de IA permiten personalizar al máximo el recorrido de cada cliente sin tener que diseñar un modelo distinto para cada uno. Y eso no es todo. Las recomendaciones y la personalización se vuelven más acertadas con el tiempo conforme la IA aplica las valoraciones de los usuarios, lo cual se traduce en clientes más satisfechos y un mayor número de conversiones.
2. Ayuda a encontrar los productos idóneos
Las tiendas físicas cuentan con una figura clave: los dependientes, capaces de captar las señales de los compradores para sugerirles los productos indicados. En el mundo virtual, el dependiente es la IA generativa, un dependiente digital que guía a los compradores, les ayuda a descubrir productos y presta una atención de primera categoría. Y es que es tal su dominio del lenguaje natural que puede ganarse la confianza de los usuarios con facilidad pasmosa.
3. Aumenta la productividad de todos sus empleados
Ya seas comerciante, profesional del marketing o responsable de comercio electrónico, la IA generativa puede ahorrarte tiempo automatizando las tareas sistemáticas. Además, si quieres aumentar las ventas, puedes servirte de inteligencia artificial para redactar las descripciones de los productos, poner en marcha campañas publicitarias eficaces y mucho más. Varios de los procesos que antes eran manuales y llevaban mucho tiempo, como crear promociones, ahora pueden automatizarse a gran escala. Esto, sumado a la programación generativa, fomenta la innovación empresarial.
La IA también puede aportar información valiosa y dar recomendaciones para que a tus equipos les resulte más fácil alcanzar sus objetivos estratégicos. ¿Quieres deshacerte de los productos que no se venden para dar paso a otros nuevos? ¿O conseguir que los compradores vuelvan al carrito? La IA generativa te echa un cable aconsejándote promociones, precios o mensajes publicitarios. ¿Que necesitas incrementar el importe medio de los pedidos? La IA puede recomendarte estrategias de eficacia probada para que los clientes añadan más artículos al carrito, y tú aumentes tus ingresos.
4. Mejora los servicios posventa
Envío rápido y gratuito, seguimiento de pedidos y facilidad de devolución. Estos servicios han pasado a considerarse requisitos mínimos a raíz del desarrollo tecnológico del comercio electrónico. Por suerte, ahora la IA generativa aportará nuevas formas de optimizar la gestión de inventarios.
Por ejemplo, una vez entrenada por los gestores de inventario, es capaz de analizar informes de devoluciones y opiniones de clientes para afinar las descripciones de los productos y reducir las tasas de devoluciones. Esta tecnología viene de perlas a los planificadores de rutas para trazar itinerarios de entrega más sostenibles. Y lo mismo puede decirse de los equipos de operaciones, que, gracias a su análisis de datos de envío y cumplimiento, pueden dinamizar y rentabilizar la adquisición y el envío de productos.
5. Refuerza la detección de fraudes
Detectar el fraude es imprescindible en el comercio electrónico. Por si fuera poco, los estafadores no paran de urdir estratagemas cada vez más avanzadas. De hecho, las empresas pierden una media del 5 % de sus ingresos anuales debido al fraude.
La capacidad predictiva de la IA puede desentrañar estas artimañas para contrarrestar las amenazas de los perpetradores. Los datos obtenidos durante este proceso pueden servir a los equipos de soluciones de pago para identificar y neutralizar las actividades fraudulentas sin bloquear las compras legítimas.
Integra la IA en tu estrategia de comercio electrónico
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La calidad de la IA depende de la de tus datos
¿Quieres probar la IA generativa en tu sitio de comercio electrónico? Para sacar partido a esta tecnología, es indispensable que los datos de tu empresa tengan el mismo formato. Una vez que tus datos convivan en armonía, úsalos para ajustar un modelo de lenguaje extenso (LLM) que ya tengas a fin de dar vía libre a la IA generativa. (Un LLM es un algoritmo de IA que emplea técnicas de aprendizaje profundo y amplios conjuntos de datos para comprender, generar y predecir contenido nuevo).
Las mejores plataformas de IA te permiten combinar los datos de tu empresa —transacciones, productos, pedidos, cumplimiento, etc.— con los de tu software de gestión de relaciones con clientes (CRM) y otros datos de terceros. ¿Para qué? Para que te hagas una imagen completa de tus clientes. Y todo ello implantando férreas medidas de seguridad y rigurosos controles de confidencialidad. Gracias a estos datos, podrás automatizar los procesos, desarrollar tu negocio, personalizar la experiencia de tus clientes y aprovechar información útil.
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