BikeForce y St. Martins School, dos proyectos para impulsar la educación en África

La actividad filantrópica de una compañía como Salesforce, vinculada desde su nacimiento a colaborar con diferentes causas sociales que promuevan la igualdad y la ayuda a los colectivos desfavorecidos, no podía dejar fuera de su radio de acción a África. En uno de los continentes más castigados por la desigualdad y la pobreza, Salesforce lleva años trabajando para que la formación de los más pequeños siente las bases de una sociedad más justa y con más oportunidades. A través de todos nuestros canales en redes sociales apoyamos al equipo de voluntarios BikeForce y su iniciativa más importante: “Bicicletas para la Educación”. Este grupo de ciclistas aficionados empleados de Salesforce realiza retos periódicamente con el objetivo de recaudar fondos para la ONG Bicicletas sin Fronteras, fundada por Romà Boule, que dota de bicis a los niños de zonas rurales de Senegal para que puedan desplazarse al colegio y completar sus estudios de manera regular. Ya son 1.000 bicicletas las que se han distribuido a los institutos, pero el objetivo es entregar muchas más para consolidar a este país africano como uno de los de mayor nivel educativo del continente. Con los fondos que BikeForce ha logrado en 2020 (más 11.000 euros) han conseguido que más de 50 jóvenes senegaleses lleguen antes y más descansados al colegio. El proyecto va más allá de entregar bicicletas a los centros educativos. Se está construyendo un modelo sostenible que cuenta con talleres y con formación de profesionales para el mantenimiento. También se ha trabajado para crear una fábrica de bicicletas en el propio Senegal. Este año, el reto deportivo asociado a esta buena causa ha sido la subida a uno de los puertos míticos del ciclismo universal: el Tourmalet, en los Pirineos franceses. Fernando Gallego es el alma máter de esta iniciativa y el mejor cronista de los retos que los componentes de bikeforce superan sobre dos ruedas.

Sin salir de África, de Senegal nos desplazamos a Kenia para adentrarnos en otro de los proyectos de los que nos sentimos especialmente orgullosos: St. Martin´s School, un colegio con el que Salesforce colabora económicamente y mediante labores de voluntariado para promover un futuro prometedor en un lugar donde las condiciones de vida de niños y niñas son durísimas. Gracias a esta labor, St. Martin’s School funciona como un oasis de paz y normalidad en el barrio marginal de Kibagare en Nairobi, ya que los menores encuentran aquí educación en un ambiente seguro donde pueden aprender, jugar y recibir comidas de manera regular. Este año, debido a la pandemia, St. Martin’s, ha tenido que cerrar, aunque planea volver a abrir en enero. Los efectos de la Covid se hacen notar y el colegio tiene que afrontar con un presupuesto inferior al habitual la compra de mascarillas, labores de desinfección, mejorar el suministro de agua y habilitar nuevos espacios para garantizar la distancia de seguridad. Existe el riesgo de que esta escuela no vuelva a abrir y en Kibagare sería literalmente una catástrofe porque implicaría que los niños pasasen de las aulas a deambular sin rumbo en calles donde campan a sus anchas el consumo de drogas y la delincuencia. No podemos ver cómo se desmorona todo lo que se ha conseguido durante estos años, por lo que desde Salesforce Iberia hemos creado una campaña para tratar de conseguir más donaciones y contribuir a la reapertura de la escuela. Somos conscientes de que existen miles de causas benéficas que merecen un dinero que cada vez escasea más para todos, pero tanto Bicicletas para la Educación como St. Martin’s School son acciones de futuro, una inversión en los que mañana serán mejores si han conseguido recibir una formación adecuada.