Como vimos en una publicación anterior de este blog, el desarrollo de productos para pymes es una cuestión vital para pequeñas y medianas empresas, que se enfrentan a retos distintos a los que encuentran las de mayor tamaño cuando deben introducir nuevos productos y servicios.
De hecho, cuando se trata de desarrollo de productos y servicios por parte de pymes, cualquier pequeño obstáculo puede ser muy relevante, cualquier decisión puede tener un impacto clave en el presupuesto, probablemente bastante limitado, y cualquier proyecto puede hacer que un equipo pequeño se sienta superado y con recursos insuficientes. Pero también es cierto que las pequeñas empresas pueden convertir los retos en oportunidades centrándose en la agilidad y la velocidad para ser más rápidas, estar más bien conectadas y ofrecer un mejor tiempo de reacción que sus competidores más voluminosos.
Echemos un vistazo a algunas de las preocupaciones existentes alrededor del desarrollo de productos por parte de pymes, y cómo estas empresas pueden explotar al máximo sus recursos para asegurarse de que todo el proceso va como una seda.
Los retos del desarrollo de productos por parte de pequeñas empresas
Como es natural, las pymes tienen presupuestos de desarrollo de productos mucho más limitados que las grandes empresas. Esto significa que deben elegir sus productos y servicios cuidadosamente, y confirmar que el ROI potencial justifica el coste de desarrollo y los riesgos asociados. Para muchas pymes, esto significa concentrarse en desarrollar sus MVPs (productos mínimos viables).
Además, las pequeñas empresas no pueden desarrollar tantos productos, ni hacerlo tan a menudo como las grandes empresas. Esto significa que los productos que desarrollen probablemente tendrán ciclos de vida más largos, a la par que equipos más pequeños. Esto a menudo genera flujos de trabajo y procesos ineficientes, lo cual puede suponer un reto en un contexto en que la velocidad de comercialización es un elemento clave para mantener la competitividad.
Cómo optimizar el desarrollo de productos por parte de pymes
Aunque algunos de los retos que presentamos a continuación pueden parecer imponentes, las pymes están encontrando formas que les permiten, no solo superarlas, sino hacerlo con creces. A continuación, mostramos algunas formas en las que las pymes pueden desarrollar y lanzar productos nuevos e innovadores sin tirar la casa por la ventana.
Configurar un equipo de profesionales excelentes o aprovechar la experiencia interna o externa
El equipo responsable del proyecto supone los cimientos de este, por lo que es un paso esencial, ya sea crearlo o entregarle todo ese know-how acumulado. Y aunque no cuentes con un gran equipo de recursos humanos, tienes en tus manos varias herramientas que pueden simplificar el proceso de forma muy notable, como explica este artículo centrado en el CRM de Salesforce y su aplicación en estos procesos.
Desarrollar procesos eficaces u obtener ayuda de una empresa de desarrollo de productos externa
La productividad y la innovación van de la mano, especialmente en pymes con recursos limitados. Mejorar la productividad mediante la innovación es una de las mejores formas de que las pequeñas empresas mantengan su competitividad e incluso avancen a sus competidores. El líder del equipo debe delegar responsabilidades al principio del proyecto y asegurarse de que la experiencia y las tareas se han dividido adecuadamente. A partir de ahí, se puede crear una hoja de ruta para lidiar con las tareas críticas y ver qué soluciones innovadoras pueden contribuir a llevarlas a cabo. Otra opción es buscar ayuda de una empresa de desarrollo de productos externa, que puede ofrecer servicios de consultoría.
Hacer lluvias de ideas y evaluar los resultados de estas
Como se suele decir: “no hay ninguna idea mala”. Quizás sea un poco exagerado, pero la filosofía que motiva esa frase es correcta. Nunca sabes cuando una idea te puede llevar a otra y, eventualmente, a algo totalmente innovador e inesperado. Esta filosofía positiva es ideal para pensar en nuevos productos y servicios, en especial si involucras en el proceso a todas las partes interesadas. Los comentarios de los clientes suelen ser formas espléndidas de identificar espacios en que tu empresa puede aportar valor al mercado. Sencillamente, escucha a tu público para ver qué necesita.
Calcular bien los riesgos
Uno de los motivos por los que el desarrollo de productos por parte de pymes suele ser un reto es el riesgo que conlleva. Cuando un producto o servicio fallido pueden hundir a una empresa, es fácil ir a lo seguro. Pero la innovación es clave para lograr el éxito, por lo que la respuesta no es evitar el riesgo, sino evaluarlo adecuadamente. Debes analizar el mercado, tus competidores, el coste de incorporar nuevo personal y tecnologías, y el de la comercialización. ¿Cuándo estarás listo para vender tu producto o servicio y en qué situación crees que estará el mercado para entonces?
Estudiar el mercado
Investigar el mercado adecuadamente puede facilitarte el cálculo del riesgo y el propio proyecto de desarrollo de tu producto. No solo te interesará comunicarte con tus clientes para averiguar si determinado producto o servicio serían bien recibidos, sino también para garantizar que tu empresa está en posición de brindarlos. Hacer un estudio de mercado estándar es una buena forma de ver la demanda existente, aunque también puedes realizar un análisis FODA para valorar cómo las fortalezas y debilidades de tu empresa pueden afectar al desarrollo del producto.
Desarrollar, probar y comercializar el producto
Una vez que el producto o el servicio se han desarrollado, todavía puede que tengas que dar otros pasos antes de comercializar el producto. Si se trata de un servicio que requiere pruebas o certificaciones, asegúrate de programar una cita con la autoridad pertinente con la necesaria antelación. Si te preocupa lo rápido que pasarás a comercializar el producto (algo muy habitual en la actualidad), este es uno de los primeros pasos que debes dar. Si lo que estás desarrollando es un producto, te interesará generar un prototipo de bajo coste tan pronto como te sea posible a fin de obtener feedback y poder aplicar cambios antes del gran lanzamiento.
Crear una estrategia de marketing
Es de esperar que, en algún momento de la fase de lluvia de ideas, hayáis logrado identificar una propuesta única de venta para vuestro producto o servicio. Este es el elemento que diferencia el producto del de otros presentes en el mercado, y lo que vas a utilizar como base para tu estrategia de marketing. Puedes considerarlo como la huella dactilar de tu marca. Lo primero será resaltar esta propuesta única de venta, pero debes también alinear la campaña de marketing con el mensaje global de tu marca. Una vez que tengas una estrategia de marketing, puedes usar plataformas CRM o de Inteligencia Artificial para presentar comunicaciones personalizadas a tus clientes actuales y potenciales.
El producto está listo, pero la aventura justo empieza
Una vez que el producto o el servicio se ha implementado y tu audiencia está informada al respecto, todavía queda trabajo que hacer. El contexto competitivo actual requiere constante innovación, así que debes estar preparado para programar proyectos de desarrollo de productos de forma periódica (y tener en cuenta los costes que ello implica). Utiliza los comentarios de los clientes y sus aportaciones para mejorar constantemente tus productos y servicios, y asegúrate de que cumples sus expectativas. Y lo que es todavía más importante: debes estar preparado para aprender de tus éxitos y tus errores, que te permitirán acercar tu empresa a tus competidores de mayor tamaño, tanto a nivel de experiencia como de conocimiento.
Aunque puede que las pymes no tengan acceso al mismo capital que las grandes empresas, sí pueden tener ideas brillantes, un equipo especializado y estrategias innovadoras que contribuyan a mejorar su productividad y estar un paso por delante de la competencia. Cuando hablamos de desarrollo de productos de pymes, el futuro no tiene límites.
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